sábado, 26 de junio de 2010

El lumbago o lumbalgia

El lumbago o lumbalgia afecta a un tanto por ciento altísimo de la población, siendo uno de los grandes males causados por nuestro ritmo de vida.


¿Qué es el lumbago o lumbalgia?


El lumbago o lumbalgia es una inflamación dolorosa de las lumbares o zona baja de la espalda. Es un problema puramente "mecánico" ya que no está provocado por ningún virus ni bacteria.



Síntomas del lumbago o lumbalgia

El dolor puede ser sólo en un lado de la espalda o en ambos e incluso irradiar un poco hacia las piernas. Suele empeorar según la postura que adoptemos y lo cansados que estemos. Algunas personas sienten mucho calor y otras en cambio notan la zona muy fría. Hay personas que sufren de lumbago o lumbalgia y mejoran con pocos días pero en cambio hay gente que sufre de lumbago de forma crónica.



Causas o etiología del lumbago o lumbalgia

Esfuerzos en mala posición: trabajar en mala postura (planchar la ropa mucho tiempo, levantar muchos pesos, determinados trabajos del campo, etc.) y de forma continua pueden causarnos un lumbago.

Un tirón muscular: a veces un movimiento brusco puede provocar un tirón. Es muy habitual cuando hacemos ejercicio físico sin previo calentamiento.

Golpe de frío: cuando pasamos mucho frío (especialmente en la espalda)

Gases intestinales y estreñimiento: es curioso como mucha gente con el abdomen hinchado por gases o estreñimiento crónico sufren de lumbago o lumbalgia. La debilidad de los músculos abdominales es la causante.

Tensión muscular por estrés: la falta de relajación contrae la musculatura de la espalda y acaba debilitando la zona.

Problemas "mecánicos": que debilitan la zona como la osteoatritis y la hernia discal. Hay personas que tienen una pierna más larga que la otra (la mayoría de estos casos sólo indican que la cadera está ladeada y eso se arregla con la osteopatía o con quiropráctica)

Ir mal calzado: (como los tacones excesivamente altos) puede provocar que adoptemos una posición que cree una tensión continua en las lumbares.

Fitoterapia para el lumbago o lumbalgia

Plantas antiinflamatorias: Harpagofito, ulmaria y corteza de sauce.

Plantas remineralizantes: la Cola de Caballo o equiseto, la Ortiga, la Alfalfa o la Caña brava son ricas en minerales como sílice.

El jengibre: nos será de gran ayuda si notamos que el lumbago o lumbalgia es por frío. Lo tomaremos en infusión y también lo podemos aplicar en forma de compresa caliente.

Plantas digestivas: Poleo, Menta, María Luisa y Anís verde son ideales para eliminar los gases y favorecer una mejor digestión.

Plantas relajantes: la Melisa y la Lavanda nos pueden ayudar a reducir la tensión nerviosa.

Plantas laxantes: la flor de Malva, la semilla de Linaza o Lino, la Zaragatona y el Aloe vera o Sábila son ejemplos de plantas que nos pueden ayudar a ir al baño sin producir molestias.

El médico o especialista decidirá, en caso de lumbago o lumbalgia, que plantas nos convienen más y la dosis adecuada.



Terapias adecuadas para el lumbago o lumbalgia

Acupuntura: es quizá la terapia más eficaz y rápida para mejorar de un lumbago o lumbalgia.

Osteopatía, Quiropráctica: ayudan a alinear de nuevo las piernas (colocando la cadera en su sitio) quitando la tensión muscular de toda la espalda.

Reflexoterapia podal: Es ideal para trabajar de forma indirecta sobre una zona cuando esta está tan mal que no se puede ni tocar.

Yoga:los estiramientos y la relajación son, sin duda, básicos para quitar tensión y prevenir el lumbago o lumbalgia. La tensión física y mental, en cambio, provocan o empeoran estos casos.

Hidroterapia: las compresas de jengibre o un baño con agua muy caliente nos serán de muchísima ayuda si tenemos claro que la causa del lumbago ha sido un golpe de frío.

Consejos o trucos para el lumbago o lumbalgia

La Ergonomía es la ciencia que nos ayuda a mejorar la postura que adoptamos en cualquier actividad y nos enseña a coger cosas pesadas. El hecho tan simple de flexionar las piernas cuando cogemos algo pesado del suelo ya previene de muchas lesiones. Muchas personas que sufren de dolor de espalda cuando planchan han visto como mejoran sólo con el hecho de apoyar un pie sobre un cubo o taburete. El peso ya no recae todo sobre las lumbares.

Antiguamente los agricultores usaban siempre una faja que envolvía las lumbares y les prevenía del lumbago o lumbalgia a pesar de que pasaban muchas horas en la misma postura.



Hemos de tener mucho cuidado con el colchón en el que dormimos ya que tanto sea muy duro como demasiado blando puede favorecer los dolores de espalda (sea lumbago u otro problema)

Aplicar una crema de Árnica o de Harpagofito suele favorecer una mejoría más rápida del lumbago o lumbalgia.



En todos los casos le recomendamos consultar con su médico, terapeuta u otro profesional de la salud competente. La información contenida en este articulo tiene una función meramente informativa.

Josep Vicent Arnau





Naturópata y Acupuntor

jueves, 24 de junio de 2010

Efermedades Comunes del Utero

Enfermedades comunes del útero


Opciones para su tratamiento


Si usted tiene un problema que afecta al útero u otra parte del sistema reproductivo. Aquí se explican la mayoría de los problemas que pueden afectar al sistema reproductivo de la mujer y las formas en que se pueden tratar. Incluyendo el uso de medicamentos, procedimientos quirúrgicos (operaciones) y otros tipos de tratamiento.


El Útero

El útero se encuentra en la parte baja del abdomen, entre la vejiga y el recto. También se le conoce como matriz. Tiene forma de pera, y la parte inferior y estrecha del útero se llama cuello uterino. Cuando una mujer está embarazada, el bebé se desarrolla en el útero.

En la parte superior del útero se encuentran las trompas de Falopio y los ovarios. El sistema reproductivo consta del útero, la vagina, los ovarios y las trompas de Falopio. Haga click aqui para ver la ilustracion del útero(26 KB).

En las mujeres que no han pasado por la menopausia ("el cambio" o "el cambio de vida"), los ovarios producen la hormona estrógeno al comienzo del ciclo menstrual (la regla). El estrógeno ayuda a preparar el recubrimiento del útero (llamado endometrio) para un embarazo. Cuando el útero está listo, uno de los ovarios libera un óvulo. El óvulo baja por la trompa de Falopio, donde espera la posible fecundación.

Si la mujer queda embarazada, el óvulo ya fecundado se mueve hasta el útero, donde se adhiere al endometrio. Si no queda embarazada, el endometrio y el óvulo no fecundado se eliminan a través de la vagina durante la siguiente regla (menstruación) de la mujer.



Algunos de los problemas que pueden afectar al útero son:


•Masas no cancerosas en el útero, llamadas fibromas, que pueden causar dolor y sangrado.

•La endometriosis, en la que el tejido de recubrimiento del útero crece fuera de éste.

•Sangrado abundante cada vez que se tiene la regla, o entre una y otra menstruación.

•Desequilibrios hormonales.

•Dolor pélvico sin causa aparente.

Opciones para su tratamiento


Es probable que su médico le haya recomendado que se someta a una histerectomía o a otro tipo de tratamiento. Antes de decidir qué hacer, es importante que comprenda el problema y las diferentes opciones de tratamiento.

Esta publicación le puede ayudar a pensar acerca de su enfermedad, informarse sobre las opciones de tratamiento, y a hacer las preguntas adecuadas en su caso.

Tenga en cuenta que cada mujer es diferente y que cada caso médico es diferente. Una buena opción de tratamiento para una mujer puede no serla para otra. Por eso usted debe:


•Hablar detalladamente sobre las opciones con su médico.

•Hacer preguntas hasta que entienda toda la información.

•Considerar la posibilidad de obtener una segunda opinión.

•Junto con su médico, elegir las mejores opciones de tratamiento en su caso.

Usted no es la única

Lo primero que debe saber es que usted no es la única. Aproximadamente una de cada 10 mujeres entre los 18 a 50 años de edad tiene este tipo de problema. Existen tratamientos para aliviar los síntomas que causan estos problemas y, después del tratamiento, la mayoría de las mujeres está satisfecha con los resultados y sin dolor u otros síntomas desagradables.


El primer paso para obtener alivio es determinar cuál es el problema.


Indices


Cuál es el problema
Enfermedades uterinas no cancerosas
Fibromas
Endometriosis
Hiperplasia uterina
Prolapso uterino
Quistes ováricos
Enfermedad pélvica inflamatoria
Dolor menstrual intenso
Sangrado menstrual muy abundante
Dolor pélvico crónico
Lo que debe saber acerca de la histerectomía
Preguntas que debe hacerle al médico
Glosario
Cuál es el problema



Existen varias formas de encontrar o diagnosticar) el problema. Entre las más comunes:

Historia clínica

El primer paso para diagnosticar su problema es tomar una historia clínica. El médico—o a veces la enfermera—le hará preguntas acerca de su historia clínica. Estas incluyen: sus síntomas, cualquier otra enfermedad grave que haya tenido, las operaciones que haya tenido en el pasado, si ha estado embarazada, o si ha tenido hijos. También es posible que le pregunten sobre la historia clínica de sus familiares cercanos.


Si ha estado usando hierbas, acupuntura u otros "remedios caseros", dígaselo al médico.

Es posible que su médico le pregunte acerca de su vida sexual. Puede que usted se sienta incómoda al hablar de asuntos tan personales, pero es importante que su médico sepa si hay algo en su vida sexual que pueda relacionarse con su enfermedad.

Examen vaginal

El médico examinará el interior del cuello uterino y el útero. Usará un espéculo para mantener las paredes de la vagina separadas durante el examen. A veces este examen es incómodo y es posible que sienta un leve calambre, pero generalmente no es doloroso. Para sentir menos molestia, trate de no estar tensa. Posiblemente el médico examine el interior de la vagina y el cuello uterino con un tubo con luz.

Examen de Papanicolaou (o la prueba "Pap" o Papanicolaou)

Durante el examen vaginal, el médico toma una muestra de células del cuello uterino con un raspador de madera, torunda de algodón o cepillo pequeño. El examen es rápido y no duele. Las células se colocan en un portaobjetos de vidrio que se envía al laboratorio. El examen es una forma de diagnosticar el cáncer del cuello uterino o la displasia, que es una condición que puede progresar hasta el cáncer.

Todas las mujeres de 18 años de edad y las más jóvenes que son sexualmente activas deben hacerse un examen de Papanicolaou cada 1, 2 ó 3 años.

Pruebas de laboratorio

El médico le tomará una muestra de sangre y de orina y las enviará a un laboratorio para que las examinen. Los resultados de estas pruebas le darán mucha información acerca de su salud general.

Exámenes con imágenes

Existen muchas formas de examinar el interior del cuerpo sin tener que hacerlo mediante una cirugía. La radiografía es la más conocida. Otras posibles "radiografías" que su médico puede recomendar son una ecografía (o sonograma), una escanografía de TAC o RNM. Estas imágenes le ayudan a obtener más información acerca de los posibles problemas.

Según sus síntomas, es posible que su médico le sugiera hacerse una biopsia endometrial, un legrado u otras pruebas que le ayuden a diagnosticar el problema. Al final de la publicación se presenta un glosario con las explicaciones sobre estas pruebas.





Enfermedades uterinas no cancerosas

Después de la historia clínica y los demás exámenes, el médico le hablará sobre su caso en particular y las opciones de tratamiento disponibles. Más adelante se presenta una lista de preguntas que le ayudarán durante esta conversación.

Las operaciones (procedimientos quirúrgicos), medicamentos (incluidas las hormonas), una combinación de ambos u "observación" son las opciones de tratamiento más comunes para la mayoría de las enfermedades uterinas no cancerosas. La "observación" consiste en no recibir tratamiento alguno, pero seguir una cuidadosa vigilancia junto con su médico y hablar con él/ella sobre los síntomas. Si después de un período de observación aún tiene problemas, puede considerar otras opciones.

Continuamente surgen nuevos tratamientos. Cerciórese de preguntar a su médico si existen nuevos tratamientos que no se han descrito en esta publicación.

Es posible que su médico le recomiende hacerse una histerectomía. Si este es el caso, lea sobre la histerectomía.

Recuerde que todos los tratamientos, incluidos medicamentos, operaciones o tratamientos de otro tipo, o la decisión de esperar o no recibir tratamiento alguno, presentan riesgos y beneficios. No deje de preguntar acerca de los riesgos y beneficios de cada opción disponible. Luego puede tomar las mejores decisiones de tratamiento en su caso.



Fibromas




IMAGEN DE UN GRAN FIBROMA




¿Qué son los fibromas?

Los fibromas son masas que se forman en las paredes del útero. A veces el fibroma tiene un tallo con el que se fija en el exterior del útero. Los fibromas pueden ser tan pequeños como una semilla o guisante, o tan grandes como una naranja o un melón pequeño. Aunque los fibromas se llaman "tumores", no son cáncer sino masas de músculo liso.

Aproximadamente 2 de cada 10 mujeres que no han llegado a la menopausia tienen fibromas. El término técnico para éstos es leiomioma.

Es posible que los fibromas no causen síntomas, o que causen dolor o sangrado. Si crecen hasta presionar la vejiga, pueden causar problemas para orinar.

Los fibromas también pueden hacer más difícil el embarazo. A veces pueden causar problemas durante el embarazo o el parto. Incluso puede causar un aborto involuntario o parto prematuro.


¿Cuáles son los tratamientos disponibles?


Existen varias opciones de tratamiento. Todo depende del tamaño de los fibromas, del lugar donde están, y de si usted está embarazada o quiere quedar embarazada.

Si el fibroma es pequeño y no tiene síntomas, es posible que la observación sea el único tratamiento necesario. Tendrá que visitar regularmente al médico para que le haga un examen pélvico y vigile el crecimiento del fibroma.

Los tratamientos no quirúrgicos (sin operación) para los fibromas incluyen las hormonas y los medicamentos para calmar el dolor.

•El uso de la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH) puede reducir el tamaño de los fibromas, lo que puede hacer más sencilla una operación. También se puede usar como tratamiento, en vez de una operación.

•Posiblemente su médico le recete ibuprofeno (por ejemplo, Advil), acetaminofeno (por ejemplo, Tylenol) u otro medicamento para calmar el dolor.

Entre los tratamientos quirúrgicos (operaciones) para los fibromas están la histerectomía y la miomectomía


•La histerectomía se recomienda cuando los fibromas causan síntomas, cuando han crecido rápidamente, o cuando son grandes (del tamaño de una toronja).

•La miomectomía es una operación para extraer un tumor fibroide sin extirpar el útero. Esto permite que la paciente se pueda embarazar, aunque tal vez sea necesario hacer una operación cesárea para dar a luz.

El tiempo de recuperación de una miomectomía es de 3 a 4 semanas. Aproximadamente 20 por ciento de las mujeres que se somete a una miomectomía necesita transfusión de sangre, aproximadamente 30 por ciento tiene fiebre después de la operación, y muchas pacientes desarrollan adhesiones (tejido de cicatriz) en la pelvis durante los meses posteriores a la operación. Estas complicaciones son más probables cuando hay varios fibromas, o son grandes.


Después de la operación, se pueden volver a presentar las masas, y tal vez sea necesaria otra operación. Si está considerando la miomectomía, pregunte a su médico cuáles son las probabilidades de que crezcan nuevos fibromas después de la operación.

También debe preguntar cuánta experiencia tiene su médico en este procedimiento ya que no todos los ginecólogos han recibido la capacitación para realizarla.

•Otra opción es la cirugía con láser, que generalmente es un procedimiento ambulatorio (no se tiene que internar). En la cirugía con láser, se usa una luz de alta intensidad para extirpar fibromas pequeños.

•Según el lugar donde se encuentre el fibroma, es posible extraerlo durante una laparoscopia. El médico también puede introducir un tubo delgado (llamado histeroscopio) con láser por la vagina hasta llegar al útero. Es posible que el tubo tenga un raspador pequeño para rasparlo de la pared del útero.


Endometriosis



¿Qué es la endometriosis?


El útero está recubierto por el tejido endometrial. Durante el ciclo menstrual (regla), el tejido endometrial se engruesa y se desprende durante la menstruación.

Si tiene endometriosis, el tejido endometrial se expande a otras partes del cuerpo. Generalmente se extiende al abdomen. Esto puede hacer que crezca tejido de cicatriz alrededor de los órganos.

La endometriosis puede causar dolor intenso y sangrado anormal cerca de la fecha de la regla. El dolor durante las relaciones sexuales es otro síntoma común. Sin embargo, es posible tener endometriosis sin tener síntoma alguno. La endometriosis es una de las principales causas de infertilidad (incapacidad de quedar embarazada). A menudo no se diagnostica hasta que la mujer tiene dificultades para quedar embarazada.

La endometriosis disminuye después de la menopausia y durante el embarazo, porque el crecimiento del tejido endometrial depende del estrógeno. Si tiene endometriosis y se somete a tratamiento de sustitución de estrógeno después de la menopausia, es posible que el tejido vuelva a crecer.

La única forma de diagnosticar con certeza la endometriosis es mediante un procedimiento conocido como laparoscopía. La endometriosis puede ser una enfermedad crónica y puede volver incluso después de haberse tratado con medicamentos o cirugía.


¿Cómo puede tratarse la endometriosis?

Existen varias opciones. El tratamiento más conveniente en su caso dependerá de si desea aliviar el dolor, aumentar sus probabilidades de quedar embarazada o ambas cosas. Es importante que usted y su médico consideren cuidadosamente los beneficios y los riesgos de cada tratamiento.


Entre los tratamientos están los siguientes:

•Medicamentos, incluidas las hormonas. Existen dos tipos de tratamiento hormonal: los que hacen que el cuerpo crea que hay un embarazo, y los que hacen que el cuerpo crea que hay menopausia. El objetivo de ambos es evitar que se transmitan los mensajes que hacen crecer el tejido endometrial. Las píldoras anticonceptivas pueden utilizarse durante unos meses para tratar de reducir las adhesiones en las mujeres que desean quedar embarazadas. Otras hormonas—la GnRH y el danazol—también pueden ayudar a aliviar el dolor.

•A veces se recetan analgésicos, como el ibuprofeno (por ejemplo, Advil y Motrin) o, para el dolor intenso, a codeína.

•Otras opciones incluyen la observación y los cambios de dieta y el ejercicio.


Las cirugías para tratar la endometriosis incluyen:

•Laparoscopia con láser. Se hace una incisión en el abdomen y se eliminan las adhesiones, ya sea con rayos láser o con cauterización eléctrica.

•Histerectomía. Sin embargo, tal vez no cure la endometriosis, a menos que también se extirpen los ovarios. Si se dejan los ovarios, éstos seguirían haciendo que se produzca el estrógeno y esto es lo que podría estimular el crecimiento del tejido endometrial en otras partes del cuerpo.

•Excisión intestinal. Cuando la endometriosis afecta a los intestinos, a veces es necesario extirpar parte de éstos.

•Sección de ciertos nervios. Para aliviar el dolor, se cortan los nervios sacros, en la parte baja de la espalda.


Hiperplasia endometrial



¿Qué es hiperplasia?


La hiperplasia es una enfermedad en la que el revestimiento del útero se hace demasiado grueso y causa sangrado anormal. Se cree que la hiperplasia es producida por demasiado estrógeno.

Antes de iniciar tratamiento, según su edad y el tiempo que ha padecido de hiperplasia, es posible que su médico desee hacer una biopsia; para excluir la posibilidad del cáncer.


¿Cómo se trata la hiperplasia?

•El tratamiento hormonal con píldoras anticonceptivas o progesterona es útil para algunas mujeres.

•La histerectomía. Se suele recomendar porque algunos tipos de hiperplasia pueden conducir al cáncer. Si decide no operarse, su médico debe observarlá cuidadosamente.


Prolapso uterino

¿Qué es prolapso uterino?

Si tiene prolapso uterino, el útero está inclinado o caído. A veces está tan caído que llega hasta la vagina. Esto ocurre cuando los ligamentos que sostienen al útero en la pared de la pelvis se debilitan demasiado y no pueden sostenerlo en su lugar.

El prolapso uterino puede causar una sensación de presión e incomodidad. Es posible que la orina se salga sin quererlo.

¿Cómo se trata el prolapso uterino?

Las opciones de tratamiento dependen del grado de debilidad de los ligamentos, su edad, su salud y de si quiere quedar embarazada.


Entre las opciones que no incluyen una operación se encuentran:

•Los ejercicios (llamados Kegel) pueden ayudar a fortalecer los músculos de la pelvis. Cómo hacer los ejercicios Kegel: Contraiga los músculos pélvicos como si estuviera tratando de sostener la orina. Manténgalos contraídos durante unos segundos y luego relájelos. Repita este ejercicio hasta 10 veces, y hágalos hasta cuatro veces al día.

•Tomar estrógeno para evitar que se debiliten más los músculos y tejidos que sostienen el útero.

•Insertar un pesario—dispositivo de goma en forma de diafragma—alrededor del cuello uterino para ayudar a sostener el útero. El pesario tiene sus desventajas, ya que puede soltarse o causar irritación y puede interferir con las relaciones sexuales. Se debe extraer regularmente para limpiarlo.

•Observación.

Los tratamientos quirúrgicos incluyen los siguientes:

•Contraer los músculos débiles sin extraer el útero. Esto generalmente se hace por la vagina, pero también puede hacerse a través del abdomen. Esta cirugía no es tan extensa como la histerectomía.

•Histerectomía. Los médicos generalmente la recomiendan si los síntomas son molestos o si el útero se ha caído tanto que se sale por la vagina.


Quistes ováricos


¿Qué son los quistes ováricos?

Los quistes ováricos son sacos llenos de líquido que generalmente no son malignos. Es posible que no causen síntoma alguno, o pueden ser muy dolorosos. A veces ocurren con la regla, y es posible que desaparezcan por sí solos al cabo de unos cuantos meses. Cuando estos quistes se agrandan, pueden causar una sensación de presión o llenura.

Aunque la mayoría de los quistes ováricos son benignos (no son cáncer), deben tomarse muy en serio. Una ecografía (sonograma) podrá mostrar si el quiste contiene líquido o materia sólida. Si es sólido, puede estar relacionado con la endometriosis o puede ser canceroso.


¿Qué tratamientos existen para los quistes ováricos?

Si todavía no ha llegado a la menopausia, posiblemente no necesite tratamiento alguno, a menos que el quiste sea muy grande o cause dolor. Las píldoras anticonceptivas a veces reducen el tamaño del quiste. Si causa síntomas o mide más de 2 pulgadas de ancho, puede que sea necesaria una operación.

Cuando es necesaria la cirugía, frecuentemente se puede extraer el quiste sin tener que sacar el ovario. Aunque saquen uno de los ovarios, la mujer puede embarazarse con el que ha quedado funcional.

Después de la menopausia, el riesgo de cáncer ovárico aumenta. En este caso, generalmente se recomienda una cirugía. Es probable que su médico desee hacer una biopsia para ver si hay cáncer.

Si ya ha pasado la menopausia y tiene un quiste ovárico, hable con su médico acerca de lo que se va a hacer en la operación. Cerciórese de que entiende si van a extraer sólo el quiste, el quiste y el ovario, o si van a hacer una histerectomía. Hable sobre las opciones y exprese sus deseos o preocupaciones.


Las opciones de tratamiento incluyen:

•Observación.

•Tratamiento hormonal para reducir el tamaño del quiste.

•Cistectomía para extirpar el quiste.

•Ooforectomía para extirpar el ovario afectado.

•Histerectomía. Generalmente sólo es necesaria si el quiste es canceroso.

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Enfermedad pélvica inflamatoria

La enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) resulta de una infección que comienza en la vagina. Frecuentemente es producto de una enfermedad de transmisión sexual (ETS). La infección se propaga hacia arriba hasta el útero, las trompas de Falopio y la pelvis.

Las mujeres que usan dispositivos anticonceptivos intrauterinos (DIU) corren mayor riesgo de contraer EPI. En raras ocasiones, las bacterias que causan EPI entran al cuerpo durante el parto o el aborto.

La EPI puede causar dolor pélvico y fiebre. También puede causar infertilidad (incapacidad de quedar embarazada) por el daño a las trompas de Falopio. Es posible que se formen sacos con pus (abscesos), en la pelvis. A veces la vagina tiene una excreción purulenta (pus).

Si no se trata la EPI, el dolor puede ser tan intenso que hace difícil el caminar. La infección puede propagarse a la sangre y al resto del cuerpo; lo que produce fiebre, escalofríos, infecciones en las articulaciones y a veces la muerte.


¿Cómo se trata la EPI?

•Puede que usted y su compañero sexual reciban un tratamiento de antibióticos para tratar la infección.

•Si se ha formado un absceso, es posible que requiera drenaje.

•El tratamiento tal vez requiera hospitalización.

•Se puede realizar una operación para ayudar a sanar el tejido de cicatriz.

•Si la enfermedad no se puede curar de otra forma, tal vez tenga que someterse a una operación para extirpar los órganos afectados.

Dolor menstrual intenso

¿Qué es dolor menstrual intenso?

Algunas mujeres sufren fuertes cólicos (calambres) justo antes o durante la regla. El término técnico de este trastorno es dismenorrea. Si usted sufre este tipo de dolor, debe solicitar tratamiento. El dolor menstrual intenso puede ser un síntoma de endometriosis.


¿Qué se puede hacer para el dolor menstrual intenso?


Se usan varios tipos de medicamentos para aliviar los cólicos:

•Los analgésicos que pueden obtenerse sin receta médica y pueden ayudar, tales como aspirina, ibuprofeno, naproxeno (por ejemplo, Aleve) o acetaminofeno.

•Si los medicamentos que pueden obtenerse sin receta médica no dan resultado, pueden recetarle un analgésico más fuerte, como la codeína.

•Las píldoras anticonceptivas u otros medicamentos para reducir los cólicos.

•Cuando el único problema es el dolor, generalmente no se necesita una operación.


Sangrado menstrual muy abundante

¿Qué es el sangrado menstrual muy abundante?

A medida que usted se acerca a la menopausia, puede ser difícil saber cuándo va a comenzar su regla. El tiempo entre una regla y otra puede ser más largo o más corto de lo normal. Y cuando empieza, el sangrado puede ser muy abundante y durar varias semanas.

Es posible que tenga sangrado uterino disfuncional, que afecta con mayor frecuencia a las mujeres mayores de 45 años. Generalmente lo causa un desequilibrio de las sustancias químicas del cuerpo (hormonas) que controlan el ciclo menstrual.

Las mujeres más jóvenes también pueden tener sangrado abundante. Generalmente se debe a irregularidades del ciclo menstrual. Es posible que una mujer pase varios meses sin tener la regla, pero el revestimiento del útero sigue engruesándose. Cuando por fin el cuerpo elimina el revestimiento del útero, es posible que tenga sangrado muy abundante.

Los síntomas pueden ser muy desagradables y pueden limitar sus actividades diarias. A veces los síntomas son signo de un problema más serio.

Es probable que le hagan una prueba de sangre. Según los resultados, su historial médico y su edad, el médico puede recomendarle que se haga una biopsia para excluir la posibilidad de que haya hiperplasia endometrial.


¿Qué tratamientos existen para el sangrado muy abundante?

•Las píldoras anticonceptivas y otros medicamentos pueden ser útiles.

•La observación sin tratamiento es otra opción.

•Otra operación llamada ablación endometrial puede ayudar a reducir el sangrado menstrual muy abundante. La ablación endometrial causa esterilidad (incapacidad de quedar embarazada), pero no inicia la menopausia. Se desconocen los efectos a largo plazo de la ablación endometrial.


¿Sufre de un trastorno de sangrado?


Si tiene reglas con sangrado muy abundante (que duran más de 7 días o que requieren más de una toalla sanitaria o más de un tampón cada 2 ó 3 horas), sangrados nasales frecuentes o prolongados, si se malluga (moretones) fácilmente o si sangra demasiado después de ir al dentista, posiblemente sufra de un trastorno de sangrado como la enfermedad de von Willebrand. Esto no es lo mismo que el sangrado menstrual abundante, pero puede ser una de sus causas. La enfermedad se puede diagnosticar en un centro de tratamiento de hemofilia, y puede ser tratada. Llame a la National Hemophilia Foundation, al número 800-424-2634, extensión 3051 (sólo en inglés), para saber dónde está el centro de tratamiento de hemofilia más cercano. o


Dolor pélvico crónico

¿Qué es el dolor pélvico crónico?

Si siente dolor intenso en la pelvis y el médico no puede encontrar la causa, es posible que sufra de dolor pélvico crónico.

¿Cómo se trata el dolor pélvico crónico?

Las opciones que no requieren de una operación incluyen:

•La terapia combinada, que incluye los medicamentos antiinflamatorios que contienen ibuprofeno, píldoras anticonceptivas, fisioterapia y orientación dietética y psicológica.

•Según la intensidad del dolor, la observación puede ser otra opción.

Entre las opciones quirúrgicas están:

•Una operación para extirpar el tejido de cicatriz que tal vez esté causando dolor. Esto se llama adhesiólisis.

•La histerectomía puede ser una opción para las mujeres que tienen venas pélvicas constantemente hinchadas o cuando todas los demás tratamientos no han dado resultado. Pero ésta no siempre calma el dolor.

•Seccionar ciertos nervios de la parte baja de la espalda para ayudar a calmar el dolor.


Lo que debe saber acerca de la histerectomía


Si usted sufre de una de las enfermedades descritas aquí, es posible que su médico le haya dicho que necesita una histerectomía. Esta sección describe los diferentes tipos de histerectomía y algunas de las cosas que le convendría considerar antes de decidir acerca de esta operación.

Cerciórese de que entiende todas las opciones de tratamiento disponibles, y los riesgos y beneficios de cada una. Luego examínelas cuidadosamente con su médico para elegir la más adecuada en su caso.



La histerectomía puede aliviar los síntomas de varias enfermedades:


•Fibromas.

•Endometriosis
•Hiperplasia.

•Prolapso uterino.

•Sangrado muy abundante o irregular.

Igual que otras operaciones, la histerectomía tiene riesgos y beneficios. Como ocurre con cualquier operación, existe cierto riesgo relacionado con la anestesia y la operación en sí.


Después de la operación usted debe hacer todo con calma. Necesitará ayuda con los quehaceres del hogar, las compras y para acarrear cosas. Si tiene hijos pequeños, necesitará que alguien le ayude a ocuparse de ellos.

Después de la histerectomía nunca más tendrá la regla y no podrá quedar embarazada. Si se le extirpan los ovarios puede tener síntomas relacionados con la menopausia.


Si su médico recomienda una histerectomía le conviene obtener la mayor información posible antes de tomar una decisión. Cerciórese de preguntar acerca de otras opciones de tratamiento, incluidos los riesgos y beneficios de los tratamientos sin o con cirugía.


A continuación presentamos algunas preguntas sobre la histerectomía. Estas pueden ayudarle a tomar una decisión con su médico.


1. ¿Qué se hace exactamente en la histerectomía?

La respuesta depende del tipo de histerectomía que se haga.

En la histerectomía subtotal el útero se extirpa pero el cuello uterino, los ovarios y las trompas de Falopio se dejan intactos.

En la histerectomía total (también llamada histerectomía simple), el cirujano extirpa el útero y el cuello uterino pero deja los ovarios y las trompas de Falopio intactos.

En la histerectomía con salpingooforectomía bilateral (también llamada histerectomía radical), se extirpan el útero, el cuello uterino, los ovarios y las trompas de Falopio.

2. ¿Me quedará una cicatriz?


Que quede o no quede una cicatriz y el tipo de cicatriz depende del tipo de corte (incisión) que hagan. La incisión dependerá de la enfermedad y del método que usted elija.

En el primer método, el cirujano corta a lo largo de la línea del vello púbico. A veces esto se llama incisión de "bikini" y posiblemente la cicatriz no se vea fácilmente después de sanar.

Otro método consiste en hacer una incisión a través de la vagina. Este método no deja cicatriz visible. Se puede usar si el útero es pequeño o si ha descendido (si hay prolapso) a la vagina.

En el tercer método, se hace una incisión que va desde justo debajo del ombligo hasta encima de la línea del vello púbico. La incisión mide generalmente entre 4 y 6 pulgadas. Este tipo de incisión hace más fácil trabajar en el interior del abdomen.

Debe hablar sobre estas opciones con su médico y cerciorarse de que las entiende.

3. ¿Tendré dolor después de la operación?

Su médico puede darle medicamentos para calmar el dolor después de la operación. Aunque debe descansar lo necesario, se recuperará más rápidamente y se sentirá mejor si hace un poco de ejercicio cada día.

4. ¿Cuáles son los efectos secundarios de la histerectomía?

Los efectos secundarios dependen de varias cosas, por ejemplo su edad, su enfermedad, si todavía tiene la regla y el tipo de histerectomía que se haga. Si todavía tenía la regla antes de la operación, no la volverá a tener.

•Si no se le extirpan los ovarios, seguirá teniendo cambios hormonales como cuando tenía la regla, pero no tendrá sangrado.

•Si le extirpan los ovarios, tendrá cambios similares a los de la menopausia. Estos pueden incluir bochornos, sequedad vaginal, sudados nocturnos, cambios del estado de ánimo u otros síntomas.

Otros efectos secundarios de la histerectomía son similares a los de cualquier otro tipo de operación. Si trabaja fuera del hogar, tendrá que dejar de hacerlo durante varias semanas; el tiempo depende del tipo de histerectomía y las órdenes del médico. Necesitará ayuda en sus actividades diarias como el cuidado de sus hijos, las compras y los quehaceres del hogar. Otros efectos secundarios de la operación incluyen:

Efectos de la anestesia: Le darán anestésicos para que no sienta dolor durante la operación. Es posible que se sienta irritable, cansada o débil por unos días. También es posible que tenga náuseas. Generalmente el médico le puede dar algo para que le ayude a calmar el estómago.

Infecciones: Como ocurre con cualquier tipo de operación, siempre hay riesgo de infección. Si contrae una infección, su médico le dará un medicamento para tratarla.

Demasiado sangrado: Siempre existe el riesgo de que sangre demasiado durante una operación y que necesite una transfusión. Pregunte al médico si debe dar su propia sangre antes de la operación, o si alguien debe donar sangre para usted.

Lesiones de órganos cercanos: Durante la operación es posible lesionar otra parte cercana de su cuerpo. Aunque es poco probable, debe preguntar al médico qué podría ocurrir si un órgano se lesiona.

Algunos estudios han demostrado que en un número reducido de mujeres, la histerectomía puede resultar en los siguientes problemas: aumentar de peso, estreñimiento, cansancio, dolor pélvico sin motivo aparente y menopausia prematura, incluso cuando no se han extirpado los ovarios.

5. Si me extirpan los ovarios en la operación, ¿debo tomar medicamentos para sustituir las hormonas que los ovarios producían?

Los ovarios producen el estrógeno. Este desempeña varias funciones en el cuerpo, como ayudar a prevenir las cardiopatías y la osteoporosis (enfermedad en la que los huesos se debilitan y pueden quebrarse fácilmente). También previene la sequedad vaginal.

Existe cierta información de que la terapia de sustitución del estrógeno puede ser dañina, ya que no es producido naturalmente por el cuerpo. Algunas investigaciones han demostrado que el uso de estrógeno durante muchos años puede aumentar el riesgo de contraer cáncer del seno. Asimismo, si usted tenía endometriosis antes de la menopausia, es posible que vuelva a aparecer si empieza a tomar estrógeno después de la menopausia.

Debe considerar cuidadosamente los riesgos y los beneficios del tratamiento de sustitución de estrógeno. Pida al médico que le explique lo que no entienda.

6. ¿Cómo me sentiré después de la histerectomía?

Obviamente, cada mujer reaccionará de forma diferente a la operación. Si le extirpan los ovarios junto con el útero, es posible que tenga bochornos u otros síntomas similares a los de la menopausia (el cambio). Es posible que le recomienden un tratamiento de sustitución de estrógeno u otro medicamento para ayudarle a calmar los síntomas.

Es posible que le preocupe no poder disfrutar de las relaciones sexuales después de la operación, o que su compañero no la encuentre tan atractiva. Hable con otras mujeres que han tenido esta operación. Tal vez le sorprenda saber que ellas todavía disfrutan de una vida sexual activa y satisfactoria después de la histerectomía.

La edad es un factor importante en la forma en que la mujer reacciona emocionalmente a la histerectomía. Esto ocurre especialmente en las jóvenes que no han comenzado a tener hijos, o que no han tenido el número de hijos que desean. A veces los médicos pueden encontrar formas de ayudarle a manejar su enfermedad si desea quedar embarazada antes de la operación. A veces la histerectomía es necesaria para mantener la salud de la mujer, y tal vez no sea posible posponerla.

Si el dejar de poder quedar embarazada es una decisión difícil, debe hablar con su médico o una trabajadora social acerca de las posibilidades de adoptar o acoger a un niño, u otras opciones.

Lo más probable es que la histerectomía, como tratamiento de las enfermedades uterinas no cancerosas, mejore la calidad de vida. En parte porque pone fin a los síntomas dolorosos. Sin embargo, unas cuantas mujeres se sienten peor después de la operación y se arrepienten de haber decidido hacérsela.

Examine con el médico cada una de las opciones y considerar las ventajas y desventajas de la operación. También es conveniente que hable con sus familiares y otras personas cercanas antes de tomar una decisión.

Tal vez sea aconsejable que le pregunte a su médico o enfermera acerca de formar parte de un grupo de apoyo antes o después de la operación. Puede ser útil hablar de sus inquietudes con otras mujeres que se han sometido a la histerectomía.

7. ¿Debo obtener una segunda opinión?

Obtener una segunda opinión de otro médico es una buena forma de cerciorarse de que la histerectomía es la opción que le conviene. No se sienta incómoda al decirle a su médico que desea obtener una segunda opinión. Los médicos esperan que sus pacientes lo pidan.

Muchos planes de seguros exigen una segunda opinión antes de someterse a una operación. Pregunte a su compañía de seguros si cubre el costo de una segunda opinión.

Si decide obtener una segunda opinión, cerciórese de que lleva la historia médica que ha hecho el primer médico para que el segundo no tenga que repetir los exámenes. Asegúrese de que ambos le expliquen claramente sus opiniones.


Conclusiones

Vivir con una enfermedad uterina no cancerosa puede ser doloroso, enervante, agotador y a veces peligroso. Pero no tiene que sufrir, porque existen tratamientos y en muchos casos no es necesario que renuncie a su capacidad de quedar embarazada. La histerectomía no siempre es la única, o ni siquiera la mejor opción.

La decisión en cuanto al tratamiento adecuado debe tomarla con su médico y su familia. Siempre es aconsejable hablar de sus opciones con más de un médico. También es importante hacer saber a sus seres queridos que necesitará apoyo y ayuda mientras recibe el tratamiento.

Datos sobre la histerectomía

¿Sabía usted que...

•...a histerectomía es la segunda más frecuente operación entre las mujeres, y que sigue sólo a la operación cesárea?

•...estudios recientes indican que aproximadamente el 15 por ciento de las histerectomías no son necesarias?

•...las tasas de histerectomía son mucho más elevadas en los Estados Unidos que en Noruega, Suecia o Inglaterra?

•...a los 65 años de edad, más del 37 por ciento de las mujeres en los Estados Unidos habrá tenido una histerectomía?

•...en 1996 se realizaron aproximadamente 556.000 histerectomías en mujeres de este país?

•...las mujeres estadounidenses tienen más probabilidades de someterse a una histerectomía si viven en el sur o en la región del oeste medio?

•...los médicos graduados más recientemente tienden a recomendar menos la histerectomía?

•...casi las tres cuartas partes de las histerectomías se realizan cuando las mujeres tienen entre 30 y 54 años de edad?

•...los costos hospitalarios de la histerectomía exceden $5,000 millones anuales?

Preguntas que debe hacer a su médico


A continuación hay una lista de preguntas que le convendría hacerle al médico. No todas son adecuadas en su caso, pero tal vez le ayuden a organizar sus ideas e inquietudes.

•¿Cómo se llama la enfermedad que tengo?

•¿Cuál cree que es la causa de mi enfermedad?

•¿Se relaciona a una enfermedad de transmisión sexual? De ser así, ¿qué debo decirle a mi compañero? ¿Qué puede hacerse para que yo y mi compañero nos protejamos?

•¿Dónde puedo obtener más información acerca de mi enfermedad?

•¿Qué opciones de tratamiento tengo (tratamiento hormonal, otro tipo de medicamento, observación, operación u otra posibilidad)?

•¿Cuál tratamiento me recomendaría? ¿Por qué?

•¿Hay algo que pueda hacer para ayudar a aliviar mis síntomas?

•¿Hay maneras de resolver el problema sin tener que operarme o tomar medicamentos?

•Si necesito operarme, ¿cuánto tomará recuperarme? ¿Qué limitaciones tendré en mis actividades, incluidas las relaciones sexuales?

•¿Qué ocurriría si decido no operarme o recibir otro tratamiento, o si deseo posponer el tratamiento por un tiempo?

Sea cual sea el tratamiento que recomiende su médico, debe obtener una segunda opinión e informarse lo más que pueda acerca de lo siguiente:

•Cómo se efectuará el procedimiento o cuáles medicamentos se le darán.

•Cómo puede tratarse el dolor.

•Cómo va a ser el período de recuperación después de la operación o de otro tratamiento.

•Cuáles son los efectos secundarios comunes del tratamiento y qué puede hacerse al respecto.

•Si el tratamiento afectará su capacidad de quedar embarazada.

Tal vez haya pensado en otras preguntas que desee hacer. En tal caso, es conveniente que haga una lista antes de ver al médico.

Glosario


Abdomen: Parte del cuerpo que se encuentra debajo de las costillas y encima de la pelvis.

Ablación endometrial: Operación en la que se emplean láser y corrientes eléctricas para extirpar el endometrio.

Absceso: Herida infectada que contiene pus.

Adhesiones: Lugares donde los tejidos crecen unidos anormalmente; tejido interno de cicatriz.

Benigno: No canceroso.

Biopsia: Operación menor en la que se toma una pequeña muestra de tejido y se examina para determinar si hay enfermedad, frecuentemente se usa detectar el cáncer.

Biopsia endometrial: Muestra de tejido endometrial que se extrae y examina para determinar si hay células anormales (vea "Biopsia").

Cáncer: Enfermedad de las células del cuerpo. Las células se hacen anormales y crecen sin control. También se puede propagar a otras partes del cuerpo.

Cauterización eléctrica: Destrucción de tejido un con tipo especial de corriente eléctrica.

Ciclo menstrual (regla o período): Período de 4 semanas en cada mes, en el que se desarrolla un óvulo en el ovario, el recubrimiento del útero se engruesa y el óvulo se libera. Si el óvulo no es fecundado, el ciclo culmina cuando el recubrimiento del útero se desprende y se elimina en la menstruación (la regla).

Cistectomía: Extracción con una operación de un quiste ovárico, generalmente realizada con laparoscopia (vea "Laparoscopia").

Cuello uterino: El extremo inferior y estrecho del útero.

Displasia: Crecimiento de células anormales. La displasia es un estado precanceroso que puede hacerse o no hacerse canceroso al cabo de un tiempo.

Dispositivo intrauterino (DIU): Dispositivo insertado por un médico en el útero para prevenir el embarazo. Hay dos tipos de DIU que se usan en los Estados Unidos. Un tipo libera una hormona y debe reemplazarse cada año. El otro tipo no es medicado y puede dejarse colocado durante un período de hasta 6 años.

Ecografía (sonograma): Procedimiento de imagen en el que se producen ecos a partir de ondas de sonido que pasan a través de tejidos y forman imágenes de estructuras internas del cuerpo.

Ejercicios Kegel: Ejercicios especiales para fortalecer los músculos pélvicos. Estos ejercicios se usan para tratar el prolapso uterino y la incontinencia urinaria (la eliminación de orina cuando no se desea).

Endometrio: Tejido que recubre la parte interna del útero.

Endometriosis: Trastorno en el cual el mismo tipo de tejido que recubre las paredes del útero crece fuera de éste en el cavidad pélvica o en alguna otra parte del cuerpo.

Enfermedad crónica: Trastorno que persiste o sigue ocurriendo durante un largo período.

Enfermedad de transmisión sexual (ETS): Enfermedad que puede transmitirse de una persona a otra durante contacto sexual; por ejemplo, la sífilis, la gonorrea o el SIDA.

Enfermedad de von Willebrand: Trastorno hemorrágico hereditario. Llame a la National Hemophilia Foundation, 1-800-424-2634 si desea más información.

Enfermedad pélvica inflamatoria (EPI): Infección causada por bacterias, generalmente de una enfermedad de transmisión sexual (vea "Enfermedad de transmisión sexual"). La EPI puede afectar al útero, los ovarios y las trompas de Falopio. Puede causar dolor pélvico persistente y, si no se trata, puede causar infertilidad (incapacidad de quedar embaraza). A veces, la infección que causa EPI se transmite a través del uso de un dispositivo intrauterino (vea DIU) o durante el parto o aborto.

Escanografía de TAC: Un tipo especial de imagen corporal procesada por una computadora y que se proyecta en una pantalla para ser visualizada. También se llama radiografía de una sección (o tajada) del cuerpo.

Espéculo: Instrumento de metal o plástico que el médico inserta en la vagina para ayudar a examinar la vagina y el cuello uterino.

Estrógeno: Hormona producida en los ovarios que influye en el desarrollo y la salud de las funciones y los órganos reproductivos femeninos.

Examen de Papanicolaou (prueba "Pap"): Procedimiento que no causa dolor en el que se extraen células del cuello uterino durante un examen vaginal, se colocan en un portaobjetos y se examinan mediante un microscopio para determinar si hay signos de cáncer o de estados precancerosos.

Fecundación: El momento en que el espermatozoide penetra en el óvulo y el bebé comienza a crecer.

Fibromas: Masas no cancerosas que ocurren más frecuentemente en las paredes del útero.

Hiperplasia: Crecimiento anormal del recubrimiento uterino, probablemente causado por un exceso de estrógeno. A veces esto se considera un estado precanceroso, particularmente en las mujeres que se acercan a la menopausia o que ya la han pasado.

Histerectomía: Operación para extraer el útero. A veces, el cuello uterino o los ovarios, y las trompas de Falopio también se extraen.

Histeroscopio: Tubo delgado y con luz que se inserta en la vagina para examinar el cuello uterino y el interior del útero.

Hormona: Sustancia química producida por el cuerpo que regula ciertas funciones corporales. Las hormonas sintéticas (manufacturadas por el hombre) se usan en las píldoras de control de la natalidad y en medicamentos para tratar ciertos problemas de salud.

Hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH): Hormona que a veces se receta para reducir los tumores fibroides.
Laparoscopia: Operación que permite al médico observar el interior de la cavidad pélvica al insertar un instrumento en forma de tubo a través de una pequeña incisión en el abdomen.

Legrado: Procedimiento quirúrgico que consiste en dilatar (abrir) el cuello uterino y raspar el recubrimiento uterino (endometrio).

Leiomioma: Término técnico que significa tumor fibroide.

Ligamentos: Banda de tejido que puede estirarse y que sostiene otras partes del cuerpo.

Matriz: Otra palabra que significa útero.

Menopausia: El "cambio"; el momento en que una mujer deja de tener la regla (deja de menstruar).

Menstruación (regla o período): El desprendimiento del recubrimiento del útero que ocurre cada mes cuando la mujer no queda embarazada.

Miomectomía: Operación para extraer tumores fibroides.

Observación: El médico ve a la paciente regularmente para seguir la evolución de la enfermedad, hablar acerca de los cambios y cerciorarse de que se están calmando los síntomas.

Ooforectomía: Extracción de un ovario.

Operación cesárea: Procedimiento quirúrgico para el nacimiento de un bebé a través de una incisión (cortadura) en el abdomen y el útero.

Ovarios: Órganos pequeños que producen hormonas (por ejemplo estrógeno) y óvulos. Están situados uno a cada lado del útero.

Progesterona: Hormona que prepara el revestimiento del útero (endometrio) para que reciba el óvulo fecundado. La progesterona sintética puede usarse para tratar el sangrado menstrual muy abundante y otras enfermedades.

Prolapso: La caída o desviación del útero o la vejiga si los ligamentos que los sostienen se estiran.

Recto: La porción inferior del intestino grueso.

Resonancia nuclear magnética: Técnica de imagen que permite ver los tejidos blandos del cuerpo.

Salpingooforectomía bilateral: Extracción de ambas trompas de Falopio y ambos ovarios.

Sangrado uterino disfuncional: Sangrado uterino anormal que no está asociado con un tumor, una inflamación o un embarazo.

Sistema reproductivo: Órganos del cuerpo que permiten a la mujer quedar embarazada y mantener y dar a luz a un hijo. Estos incluyen el útero, las trompas de Falopio, los ovarios y la vagina.

Trompas de Falopio: Trompas que se encuentran en ambos lados del útero y que movilizan a los óvulos desde el ovario hasta el útero.

Útero: Órgano en el que crecen los bebés; matriz.

Vagina: Apertura en forma de tubo que se extiende desde el útero hasta la parte externa del cuerpo.

Vejiga: Órgano en forma de saco que se encuentra en la región pélvica y en la que se almacena la orina antes de eliminarse del cuerpo.


Fuentes:
Esta publicación fue redactada por la Agency for Health Care Policy and Research (AHCPR) con el apoyo de la Oficina para la Salud de la Mujer del Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos. La AHCPR es una agencia federal dedicada a mejorar la atención médica.